Telegrama a la Conferencia episcopal española

¿Alguien podría decirnos a todos cuánto dinero público va a tirar la iglesia, en estos tiempos de crisis, de gente en el paro y de necesidades apremiantes para muchos, para sostener la susodicha campaña? NO me interesan las cifras, me interesa más saber la equivalencia en raciones de comida, en mantas, en litros de agua potable, en medicamentos contra el sida en África, en libros escolares... ¡Qué lujazo! ¡Qué cinismo! ¡Que hipocresía!

Pepe Rubianes ya avisó: "¡No les den mucho dinero a los catetos! Que enseguida se les van a convertir en fachas..." Con los obispos eso no pasa. Nacieron ya así; y a mí me dan más miedo los obispos (y a los niños también) que los catetos... Estos días, sin embargo, ¡cómo sufren unos y otros! La papisa Espe anda con mala cara...